El otro día vi por la tele un pequeño fragmento de la película The Game de David Fincher con Michael Douglas de protagonista y me entraron ganas de comentar algo sobre una de las películas del director, Zodiac, aunque fuera un pequeño comentario o una crítica no demasiado lúcida. A día de hoy, Zodiac me parece la cima del director por encima de películas como Se7en, El club de la lucha o La red social. Y eso que en su estreno en el cine, aunque fue una película que me gustó, Zodiac no me llegó a entusiasmar. Quizá por que había demasiada información sobre el asesino, por ser una obra muy detallada y fría, por esa mirada obsesiva que comparten David Fincher y el personaje que interpreta Jake Gyllenhaal, algo que posteriormente he visto como una de las mayores virtudes de la película. El caso es que en la revisión, la película ganó mucho y acabé rendido desde el inicio hasta el final de la película.
Como he dicho, la película contiene muchísima información, a ratos bien podría considerarse un documental muy detallado sobre el asesino en serie, y es muy fácil que en varios momentos el espectador se pierda porque además Zodiac es una película que cubre un periodo de tiempo muy extenso, que muchos años parece que pasen de puntillas. Podemos tener una escena en que veamos la primera cita (a ciegas) entre los personajes de Jake Gyllenhaal y Chlöe Sevigny y poco después verlos casados y con hijos. Así que el trabajo de Fincher es que todas esas cosas no importen demasiado, pero sin dejarlas de lado en la trama, y centrarse en la investigación y en los asesinatos, amén de en las burlas del asesino hacia los periódicos y la policía. Desde la escena inicial, donde Fincher utiliza un par de trucos digitales integrados en la trama de manera soberbia, la película resulta atrapante. Su ambiente enrarecido, enfermizo y opresivo (incluso en escenas de apariencia más inocente como esos momentos en el periódico) bien podría asemejarse con los asesinatos que comete Zodiac, que no le importan que sean por la noche o a plena luz del día. Porque además de tener un gran argumento, visualmente Fincher se siente muy cómodo, en algunos momentos incluso superando ese clima angustioso de Se7en, generando tensión en varias escenas como en las que actúa Zodiac o haciendo crecer el agobio que siente el personaje de Jake Gyllenhaal. Dice mucho de ese agobio la escena en que tiene protagonismo la película clásica El malvado Zaroff, vista como una de las obsesiones del asesino y que proyectaba en unos cines.
La película incluso se permite el lujo de tener una referencia a la película que se inspiró en los hechos que cuenta (aparece un momento con los personajes viendo Harry el sucio) y además de esa obsesión de Jake Gyllenhaal también vemos como crece la locura –y el alcoholismo- en el personaje de Robert Downey Jr. o como la película puede dar su visión de ciertos presuntos culpables o información aparentemente intrascendente que luego puede tener mucha importancia –el reloj de marca Zodiac-. La escena en que los detectives investigan la caravana de uno de los culpables es macabra más allá que luego dicha escena sea más o menos truculenta. Es una película perfecta tanto en la forma, donde Fincher utiliza el digital como recurso que se ajusta a la perfección, como en el contenido, con James Vanderbilt desarrollando la historia y los personajes reales de manera creíble. Zodiac me parece una de las mejores películas de la década pasada pero quizá a día de hoy sea vista por debajo de otros trabajos del mismo director. Sea como sea, una película absolutamente recomendable. Y una nueva bajada de pantalones por mi parte (aunque ya hace un tiempo de esto).
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