sábado, 30 de octubre de 2010

I´m Still Here: The Lost Year of Joaquin Phoenix



Después de varios meses escuchando y leyendo cosas sobre el documental, sobre si era auténtico o falso, sobre todo lo que hizo Joaquin Phoenix durante ese año perdido, he podido comprobar al fin si el documental merece la pena o no. Ciertamente, muchas veces se le nota que es un falso documental y que algunas acciones y reacciones son exageradas y no parecen corresponder a algo real. Aunque tampoco, por mucho que al final la gente haya dudado tras verla, creo que la intención es representar un cambio verdadero. Creo que es hacer una crítica a todo el que ha ido despreciando ese cambio llegando a humillar a Joaquin y como se le da la vuelta a la tortilla cuando un actor respetado y ejemplar decide cambiar de repente de vida teniendo un comportamiento extravagante. Ese cambio ha sido muy denostado y Joaquin ha sido constantemente atacado e imitado. Y se ha aprovechado de eso para su documental de manera soberbia. Se agradece y mucho el esfuerzo del actor por utilizar su propio nombre, incluso por dejarse, en cada aparición pública que hacía, en ridículo. Casey Affleck, casado con la actriz Summer Phoenix a la que hemos podido ver en la sobrevalorada El creyente y cuñado de Joaquin, filma todo con buena mano, sabiendo lo que hace en todo momento.




Lo cierto es que no creo que I´m still here vaya a sorprender a nadie aunque todo esté muy bien representado en el falso documental. Algunas de las escenas clave de la película ya las conocíamos de antemano, ya que se hicieron en un entorno público. Las que no conocíamos, que son en las que vemos a Joaquin en un entorno más privado, están bien hechas y Joaquin muestra su desesperación de manera notable. Quizá se le pueda achacar algunas cosas, como una duración algo excesiva para el material que tenemos o un final que parece intentar hacer algún tipo de reflexión, excelentemente rodado y que recuerda a algún otro director, eso sí, con cierta tendencia a lo poético. Funciona porque se relaciona de manera directa con el principio del documental aunque sí se queda grabado es por como está dirigido. Casey muestra de manera perfecta el derrumbe psicológico y la caída de la cumbre de Joaquin apoyándose en un actor que está dispuesto a todo. Se le agradecen a ambos pese a sus lagunas.


sábado, 23 de octubre de 2010

Winter´s Bone (spoilers)



La película independiente que nos llega de Sundance, donde ganó algunos premios, este año es Winter´s Bone, realizada por la directora Debra Granik. En Estados Unidos se ha hablado mucho de la película y especialmente de la interpretación de Jennifer Lawrence, aquella chica que en Lejos de la tierra quemada de Guillermo Arriaga, con una facilidad pasmosa, estaba unos peldaños por encima de Charlize Theron y Kim Basinger. Por aquí dudo que se hable demasiado sobre Winter´s Bone. Igual que en su momento Frozen River, con una maravillosa interpretación de Melissa Leo, pasó inadvertida es probable que pase lo mismo con la película de Granik. Winter´s Bone, dentro de las grandes diferencias argumentales con la película anterior, tiene cierto parecido a ésta. Las dos se desarrollan en un pasaje frío, despoblado de cualquier tipo de humanidad en sus personajes y con el personaje principal (femenino) intentando tirar para adelante como buenamente puede.




Debra Granik nos sumerge en la historia de una chica menor de edad que busca a su padre, un delincuente que trapicheaba con drogas, y que para solucionar los problemas que tiene con la casa donde vive, que se le van a quitar porque su padre la dejó a la policía para pagar su fianza. El problema es que tiene que ir preguntando por los alrededores y se encuentra en una zona donde las preguntas y más de ese tipo gustan más bien poco por lo que se lleva para casa pocas respuestas pero muchas amenazas. Winter´s Bone tiene muy buenas cosas, se podría empezar con la relación entre tío y sobrina, con un John Hawkes que lo borda. En muchos momentos recuerda a un gélido western, donde se llega a unas cotas de intensidad increíbles y donde se muestra la dureza de los habitantes del pueblo, sean hombres o mujeres, de manera creíble.
Probablemente, la escena más representativa sea aquella en la furgoneta en la que una pasiva Jennifer Lawrence se queda mirando como su tio y el policia están muy cerca de liarse a tiros. Uno porque ya ha tenido bastante esa noche y no quiere que le toquen más los huevos y el otro por intentar cumplir con su trabajo. Es una escena de muchísima intensidad, dirigida con gran nervio por una directora debutante. Ya podrían aprender algunos directores.




Pese a que no tiene grandes defectos, alguno sí tiene. A veces se intenta remarcar demasiado la diferencia entre la chica y el pueblo, con ésta intentando escapar de ese infierno teniendo el ejército como vía de escape. Pero, como es evidente, no es tan fácil escaparse sin más y más teniendo a dos hermanos pequeños que no tienen a nadie más. Todo eso se le perdona a la película que acaba siendo un producto notable y muy bien dirigido, con el que Debra Granik mantiene durante todo su metraje un buen pulso y con el que muestra que si le dejan, y esto no lo veo demasiado claro, puede labrarse un interesante hueco dentro del cine independiente. Desde luego está a años luz de la película de Sundance del año pasado, esa comedia involuntaria llena de momentos dramáticos supuestamente desgarradores llamada Precious.


domingo, 17 de octubre de 2010

La red social (spoilers)



La última película del siempre interesante David Fincher llega y lo hace tras levantar mucha expectación en E.E.U.U. tras su estreno. Reconozco que al principio no me interesaba el proyecto, leía la palabra facebook y la película me echaba para atrás, tampoco cuando se completó el reparto me interesó, los actores no ayudaron a que esos prejuicios se fueran. Tan solo los nombres de David Fincher y de Aaron Sorkin como guionista ayudaban. Pero no demasiado. Los prejuicios se fueron tras ver el trailer, que me pareció muy bueno. Y desde ese día hasta el día que la he visto en el cine, las ganas de verla fueron en aumento. Puede que no tenga la crudeza del Fincher que me gusta, el de Seven, el de El club de la lucha o el de Zodiac pero el director coge el estilo de esta última y por suerte se apoya en un personaje principal atractivo (en Zodiac no me gustó Jake Gyllenhaal ni su personaje). Es una película metódica, sosegada y tranquila, que más que sobre el facebook, que podría haber sido una película sobre cualquier otra página o cosa y no hubiera pasado nada, habla sobre su conflictivo fundador y su difícil carácter.




Creo que el punto atractivo de la película es ver como una persona tan nula para las relaciones, como muestra la película primero con su ex-novia a la que humilla después de que ésta le deje porque se siente menospreciada en cada conversación que tienen o después con su mejor amigo al que deja de lado cuando le conviene y parece que solo lo utiliza cuando necesita algo de él, inventa precisamente una página donde las relaciones es lo más importante. En ese punto, Fincher se muestra muy cómodo narrando el origen de la página, desarrollando los personajes principales y haciendo que el carácter de Mark Zuckerberg choque con el de todos los demás constantemente. Fincher dirige con sobriedad, de manera muy clásica, intentando no destacar sobre la historia de Sorkin y triunfa. Quizá no tenga los destellos de películas anteriores pero su trabajo es muy loable y los elementos gratuitos que películas anteriores suyas pudieran tener solo posee uno: la escena de la competición de los remeros, que no me gusta la forma en que está dirigida con ese Fincher queriendo destacar cuando no es necesario.




Aaron Sorkin muestra que es muy bueno a la hora de escribir diálogos y desarrollar las tramas. Sabe adentrarse en las personalidades de sus personajes y aprovecharse de la ambición y el egoísmo de Mark, de esa cierta ingenuidad que tiene el personaje de Eduardo o de la aparente seguridad en sí mismo de Sean, que quizá no sea tanta como muestra el momento en que Eduardo le amaga un puñetazo después de la emboscada que le hacen. Incluso saca lo mejor de los personajes secundarios, desde la paranoica novia de Eduardo, la humillada ex-novia de Mark que deja muy tocado al personaje principal en dos ocasiones o los tres mosqueteros que piden ayuda a Mark con una página y son engañados por él. El montaje de la película ayuda mucho, todo se sigue de manera muy clara y en La red social se combina bien toda la historia principal del origen de facebook con las dos acusaciones más importantes con jueces por en medio que tiene el personaje principal. En cuanto a actores, cabe mencionar que Jesse Eisenberg está perfecto. Bien es cierto que no es un actor con excesivos registros, pero que el que tiene liga bien con el personaje que interpreta y La red social se beneficia de eso. Andrew Garfield está inmenso, así como un correcto Justin Timberlake y el equipo de secundarios exceptuando a la abogada que interpreta Rashida Jones. Tenía especial interés por Rooney Mara después de todo lo que se ha hablado de ella en las últimas semanas, debido a que va a protagonizar la versión americana de Millennium con el mismo Fincher dirigiendo, y tengo que decir que me ha gustado mucho, de hecho en las escenas que más me gustan de La red social aparece ella y no tiene muchos minutos en pantalla la chica. Tanto el prólogo, con esa conversación entre ambos donde ya vemos a Mark en todo su esplendor y como es capaz de soltar gran cantidad de mierda sobre la otra persona casi sin darse cuenta de que la está jodiendo, como ese bello final, con Mark actualizando el perfil de ella cada segundo, me parecen increíbles.




Con todos los temas que trata La red social es muy complicado no tener bajones. La red social se mantiene muy bien más allá de la primera hora. Al final creo que se tambalea ligeramente sin, por suerte, llegar a caer hasta que vuelve a equilibrarse al final. Eso junto a no darle quizá más provecho al tema, el no aprovechar más el hecho de que el personaje se ha quedado sin nadie a su lado a cambio del éxito, son las cosas que menos me gustan. Pero son cosas muy perdonables. Tanto Fincher como Sorkin traman bien una historia con traiciones, con egoísmos, una subida a la cima del éxito con sus altos y sus bajos, de tono sombrío. David Fincher vuelve a demostrar que, en la actualidad, es uno de los directores más interesantes que existen. Esperemos que le vaya bien con su próxima adaptación, debo decir que de momento no me ilusiona demasiado pues la película sueca me pareció muy mala, pero tengo ciertas confianzas tanto en su buen reparto como en el propio director.


sábado, 16 de octubre de 2010

Machete



La nueva película de Robert Rodriguez llega después de haber sido un trailer falso de unos 3 minutos realizado para el proyecto Grindhouse, compuesto por Planet Terror del mismo Rodriguez y Death Proof de Quentin Tarantino, y que ha acabado convertido en película. Nunca me ha apasionado el cine del señor Rodriguez, ni sus proyectos más desmadrados ni sus películas infantiles más allá de ciertos destellos. Reconozco que El mariachi era curiosa, que el fragmento de Four Rooms es muy divertido, que Sin City tiene su punto y que Planet Terror y Abierto hasta el amanecer son entretenidas, especialmente en sus inicios, aunque están repletas de altibajos y cada vez que pienso en ellas me gustan menos. Pero algunas de ellas como pueden ser El mariachi, Sin City o las últimas dos citadas prefiero no revisarlas por si acaso. Machete podría formar parte del grupo en el que se encuentran Planet Terror y Abierto hasta el amanecer aunque creo que como película es claramente inferior a ambas y que se sustenta más en algunos detalles como la casquería de la que hace gala que en otra cosa.





El fallo que me parece más importante de Machete es su argumento. A mí me habría sobrado con que el leitmotiv de la película hubiera sido la venganza de Machete contra quienes le han jodido bien en el prólogo. Pero Rodriguez quiere meter una crítica bastante tosca y fuera de lugar a la inmigración, que se acaba llevando el 90% de la película y que es aburrida e insípida, está fuera de tono y de lugar y que no tiene nada positivo que aportar. Otra cosa que no ayuda a Machete es que la parodia de algunos actores resulta muy mala (especialmente en Robert de Niro y Lindsay Lohan), apoyado en unos personajes femeninos muy flojos en los que solo se salva ligeramente Michelle Rodriguez por la presencia de la actriz. La película también resulta demasiado larga, el chicle está estirado demasiado hasta que te acaba agotando. Entre lo bueno está su prólogo, que es como debería ser toda la película y que nos ofrece a un Machete dando lo suyo, una mujer desnuda y al siempre genial Steven Seagal y sus monólogos. Hay algunos actores que sí que elevan la calidad de la película como es el caso de Steven Seagal y Tom Savini, ambos personajes desaprovechados, eso sí, de Don Johnson, aunque quizá éste se toma demasiado en serio la propuesta, de Jeff Fahey y de Shea Whigham.





Las escenas violentas están bien filmadas y acaban siendo como un oasis en un desierto en demasiados momentos en los que la película se estanca por querer meter la crítica en el argumento. Igual que algunos golpes de humor (los de Machete con los guardaespaldas). Y en el desmadre final se mezcla todo combinando luces y sombras. La amenazadora presencia de Steven Seagal ayuda aunque se le desaproveche. Es una pena lo que ocurre con Machete porque podría haber sido una mala película muy entretenida y acaba siendo convertida en una mala película con cierta ambición y que acaba aburriendo demasiado para un proyecto de estas características.


martes, 12 de octubre de 2010

Buried (Enterrado)



La nueva película de Rodrigo Cortés, tras la interesante y entretenida aunque finalmente algo irregular Concursante, película que tenía una dirección con ciertos tics modernillos pero que, aún así, funcionaba perfectamente y cumplía con su propósito gracias a la habilidad del director para putear a su personaje principal, llega tras haber levantado muchos aplausos en todos los sitios donde se ha estrenado. Quizá eso hiciera que yo tuviera demasiadas expectativas a la hora de su visionado. Esas ovaciones junto a las comparaciones realizadas entre Buried y algunas películas de Alfred Hitchcock hizo que me ilusionara mucho. Y aunque Buried no es ni mucho menos una mala película, es una película que funciona bien y que cumple a la perfección, sí que creo que está por debajo de lo que esperaba, que no es una obra maestra pero sí una buena película. Tampoco me ha parecido tremendamente angustiosa más allá de un par de escenas.




Pero hay que destacar la labor de Rodrigo Cortés que crea una película de la nada, apoyándose en la cantidad de recursos de poder manejar la película en solo un pequeño escenario cerrado, que ofrece más posibilidades de lo que a simple vista parece. Se apoya mucho tanto en lo visual como en lo sonoro y en la mezcla entre ambos encuentra un equilibrio digno de alabar. También una cosa muy destacable es como ciertos personajes secundarios, a los que en la película solo escuchamos pero nunca vemos, cobran gran importancia. Y, probablemente, la mayor virtud de Buried sea hacer verosímil lo inverosímil, hacer que la historia sea creíble aunque opine que uno no puede aguantar tanto tiempo allí encerrado en una situación límite y gastando bastante cantidad de oxígeno a lo largo de su metraje aunque supuestamente está enterrado muy cerca de la superficie. Pero vamos, que es lo de menos. Y Ryan Reynolds está inmenso, creía que la película podía cogear precisamente por él, pero sin embargo lleva todo el peso de la película a la perfección y aprovecha la sensación de angustia que sufre su personaje y los diversos estados de animo desde desesperación a furia, ira, frustración entre otros.




Si tuviera que achacarle algo a Buried es que pienso que en varios momentos la película se mantiene solo a flote por la propia inercia de su planteamiento, de su punto de partida sin ofrecer nada demasiado destacable en esos minutos. Pese a eso la película está bien y resulta muy efectiva. Y se agradece que directores españoles cada año confíen más y más en el cine de género, dejando de lado el cine social que nuestro cine ha adoptado como marca registrada y que, salvo un par de excepciones, eran películas muy detestables y tremendamente falsas. No es que el cine de género que estamos haciendo en los últimos años me esté apasionando pero desde luego sí que hemos hecho unas pocas películas de mérito y hemos mejorado un poco respecto a hace 6-7 años.


sábado, 9 de octubre de 2010

Piraña 3D



La nueva versión de Piraña es la nueva película del director francés Alexandre Aja, un tipo que aunque no es ningún maestro ni nada parecido, sí que creo que se ha estancado un poco y que no va a terminar ofreciendo lo que en su inicio de carrera se intuía. Con Piraña no engaña a nadie, ofrece lo que prometía, la película se vendió como una obra donde reina la casquería y los desnudos femeninos. Pero nos olvidamos de la crudeza que el francés ofreció en Alta tensión o de Las colinas tienen ojos, dos películas bastante interesantes especialmente en sus inicios. Piraña en casi todo su metraje resulta ser una parodia, donde Aja en ningún momento se toma en serio su película, sabe que la película que está dirigiendo es bastante mala y quizá, precisamente en eso, Piraña encuentra su mayor virtud.




En esta película terror hay más bien poco ya que lo que prima en todo momento es el gore. Desde su inicio donde homenajea a Tiburón con el mismísimo Richard Dreyfuss, Alexandre Aja deja claras las intenciones que tiene Piraña. Y si no quedan claras en esa escena, en 5 minutos lo resuelve. Kelly Brook hablando con una cría pequeña del tamaño de sus tetas, el típico pardillo de instituto enamorado de la chica guapa de turno que tiene que hacer de canguro hasta que se ve envuelto en la aventura de su vida (irse de parranda con el grupito liderado por Jerry O´Connell), la sheriff que investiga lo que está pasando en la zona en el agua y el grupito mencionado con el director y las actrices porno (en la película aparecen unas cuantas: Riley Steele, Gianna Michaels y Ashlynn Brooke entre otras). Muchas chicas en bikini también muestran uno de los mayores alicientes que la película ofrece al espectador masculino. El femenino se tiene que conformar con el siempre carismático Ving Rhames.




Luego la película cae en la vulgaridad en varios momentos innecesariamente. Resultan muy estúpidos esos momentos y se combinan con otros que están mucho más conseguidos y que muestran que si Aja se toma esto en serio podría ofrecer cosas mucho más interesantes. Para el gore el director tiene un don a la hora de filmarlo pero casi siempre se deja llevar por el exceso. Piraña es una película entretenidilla, no puedo compararla con la original de Joe Dante porque no he tenido oportunidad de verla. Pero esperemos que después de tres remakes (Las colinas tienen ojos, Mirrors y la película que nos ocupa), Aja haga algo distinto y que le dé algo más de cabida a la tensión, al terror y un poco menos al gore.


domingo, 3 de octubre de 2010

La doble vida de Verónica (Spoilers)




La película del polaco Krzysztof Kieslowski, conocido principalmente por sus decálogos y por la trilogía de los colores (Azul, Blanco, Rojo) es un drama romántico en la que el director se adentra en la historia de dos mujeres con el mismo nombre, nacidas el mismo día, de igual parecido físico (ambas están interpretadas por Irène Jacob) y dedicadas a la música y con sus escarceos amorosos por en medio. Sin haberme adentrado demasiado en la obra del director polaco, cuya única película suya que tengo fresca en la memoria es la interesante No matarás, ya que la trilogía de los colores la tengo muy, muy lejana solo recordando bien Rojo y ciertos detalles de Blanco, estando Azul completamente fuera de mi memoria, me adentré a ver La doble vida de Verónica, película muy personal, muy dramática y muy romántica con la que el director acabó triunfando en el festival de Cannes.




El mayor acierto de Krzysztof Kieslowski para mí es su atmósfera, ese ambiente que crea de irrealidad que respira toda la película, de fantasía. Kieslowski se maneja bien en el terreno onírico y dota a su película de personalidad, plagando todo el metraje de símbolos. El momento en que una ve a la otra y le hace una foto resulta muy especial. Pero la película también posee otros. El guión del director y de Krzysztof Piesiewicz está relleno de éstos, además sabe desarrollar bien ambos personajes, como una de las dos chicas se va sintiendo más vulnerable y cambia toda su vida al morir la otra pese a no saber nada de ella ni conocerla. Es ese sentimiento de que tu alma gemela, de que una mujer que te podría comprender se ha ido y tú lo has percibido, sabes que algo le ha pasado. Pero todo este guión no sería nada si no fuera por la gran interpretación de Irène Jacob, uno de los rostros más bellos que he podido ver en una película, que dota de gran fuerza dramática al conjunto y comprende a la perfección todo esos simbolismos que Kielowski añade.




La doble vida de Verónica además se ve apoyada por varios de sus apartados técnicos. Un montaje que divide a la perfección la película en dos partes, una parte para cada mujer, la fotografía que capta a la perfección todo el aspecto onírico de la obra, la potencia de las imágenes que retrata Kielowski con su cámara con la que muestra muchas veces los sentimientos de su personaje principal y, también, una banda sonora increíble, sentimental y preciosa. Hay mucha poesía en La doble vida de Verónica y de la buena, de la que no parece falsa o impostada. Probablemente Jean-Pierre Jeunet tomó nota para Amélie, película que sí que tiene muchos de los defectos molestos que no tiene la película de Kielowski y que sí que resulta impostada y empalagosa en varios momentos pese a tener sus detalles interesantes.